¡Gracias!

Hace unos días os dábamos a muchos de vosotros las gracias por email… Y queríamos dejar constancia también por aquí, quizás, ampliando un poco más nuestro agradecimiento.

Agradecimiento navideño de Serendipia Turismo

Gracias a Silvia, porque siempre está dispuesta a echar un cable «con lo poco que sabe hacer», que es mucho más de lo que ella siempre creerá.

Gracias a Jose, que nos pone los pies en la tierra y nos ayuda a echar cuentas y a tener, al menos, siempre tres alternativas.

Gracias a Diego, que calla y sentencia, pero siempre está cuando lo necesitas.

Gracias a Dolores que sacó siempre tiempo para abrir nuevas puertas con las que poder pensar en nuevos proyectos. 

Gracias a Rosa, que endulzó alguna tarde de reuniones con su repostería y sus ideas.

Gracias a Juan Carlos, que nos abrió las puertas de un sueño y nos explicó cómo creó un oasis digno de ser retratado al borde de la frontera con Asturias.

Gracias a Teresa, José y Rubén, que fueron la chispa de este Dream en el que ahora creemos tanto…

Gracias a Sandra, que lleva dos años emprendiendo sin esconderse en un lugar en el que jugar y soñar, animando a pelear por lo que queremos ser.

Gracias a Víctor, que nos endulza de cuando en vez con sus interminables llamadas y que siempre tiene una comida pendiente.

Gracias a Millán, que siempre estuvo ahí apoyando, animando y que ayudó a que este sueño de la serendipia tuviese algo de razón de ser y un hueco magnífico en la web.

Gracias a Mary, que nos entiende como nadie y que nos acompaña desde el lado oscuro.

Gracias a Alberto, que nos concedió un café inspirador y que nos mete siempre envidia de ser un trotamundos… 

Y gracias a tantas y tantas personas que ayudáis a que poco a poco crezcamos, tomemos aliento, un poco de carrerilla y nos sigamos lanzando al vacío de creer que tenemos un hueco en este mundo; que hacéis posible que emprender sea una ilusión y no una utopía… Gracias por descolgar el teléfono cuando lo necesitamos, por los mensajes, los cafés, las sonrisas, las reuniones interminables y tantas vivencias, kilómetros y pensamientos que nos habéis animado a hacer y tener.

No ha sido un año fácil, pero ha sido un año de aprender, si cabe, más que nunca; sed felices, sed prudentes y dejad que la Serendipia llegue a vosotros, como si de una casualidad se tratase… 


Felices fiestas.

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